EL 50% DEL ÉXITO en la vida de una empresa consiste en saber hacia dónde va; es decir, en saber definir objetivos alineados con las necesidades de su consumidor final.
Por qué si las emociones condicionan nuestro mundo, ¿no nos hemos entrenado en gestionarlas de la manera más constructiva y provechosa para nuestros intereses?
Hoy en día no basta con ser experto en una materia para dirigir a un equipo hacia el éxito. Se necesitan algo más que estudios y conocimientos técnicos. Domina las llamadas “soft skills”.
Sin lugar a dudas, las empresas punteras de la economía actual basan su éxito en equipos de trabajo multidisciplinares, flexibles, creativos y con capacidad para superar retos.